Te presentamos una guía de Alcalá del Júcar y sus alrededores en la Manchuela, con especial atención a la impresionante Hoz del Júcar y a los recursos que te ayudan a preparar tu escapada.
Alcalá del Júcar se sitúa en la comarca de La Manchuela, encajado en un cañón del río Júcar y rodeado de hoces, bosques de ribera y miradores naturales.
Está bien comunicado por carretera con Valencia, Alicante, Albacete y Madrid, lo que permite una escapada de fin de semana sin grandes desplazamientos.
El casco urbano está declarado Conjunto Histórico-Artístico y ha recibido premios por su iluminación y su atractiva integración en el paisaje.
Las casas excavadas en la roca, el castillo en lo alto del peñasco y el río a sus pies crean uno de los perfiles más reconocibles de Castilla-La Mancha.
Muchas viviendas son casas-cueva perforadas en la montaña y varias pueden visitarse como miradores, museos o locales de ocio.
Al caer la noche, la iluminación del pueblo sobre la roca y el reflejo en el río convierten la hoz del Júcar en un escenario espectacular.
La zona ofrece playa fluvial, deportes de aventura y una gastronomía basada en guisos tradicionales, carnes a la brasa y productos del río.
A pesar de su tamaño, el municipio cuenta con una amplia oferta de casas rurales, restaurantes y actividades, ideal para escapadas en grupo o en familia.
Si buscas naturaleza, patrimonio y casas rurales con horno de leña y piscina privada, la Hoz del Júcar y la Manchuela son un destino perfecto para tu próxima escapada.
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